La escuela de hostelería TOPI está especializada en cocina y servicio de sala. Ofrece a los jóvenes la posibilidad de formarse en una profesión de futuro con una metodología de probada eficacia que se adapta convenientemente a las características y necesidades de cada alumno. Este centro docente forma parte de la Fundación Picarral, con una trayectoria de 30 años, “que comenzó gracias al activismo vecinal y hoy se ha convertido en un foco activo de inclusión social para toda la ciudad”, explican sus profesores.

TOPI ha aportado, y lo sigue haciendo, grandes nombres propios a la cocina y al servicio de sala del sector hostelero nacional. Muchos de ellos figuran en la obra, escrita por el periodista Arturo Gastón, 25 años apasionados por el arte de cocinar.

En estas aulas atienden aspectos formativos de interés general (manipulación de alimentos, cocina y servicio respetuosos con el medio-ambiente, inglés para camareros, etc.) promueven la especialización en diversas materias: es el caso de la gastronomía y denominaciones aragonesas o el de la coctelería con y sin alcohol.

El aprendizaje que se desarrolla en la Escuela de Hostelería TOPI es concreto y muy práctico, basado en la observación, el descubrimiento y la simulación constante de la realidad hostelera. Se opta por una pedagogía activa y participativa que integra la formación teórica, la formación técnica en cocina o comedor y barra y el conocimiento del entorno socio-profesional en el que se desarrollan y, por último, la orientación y el seguimiento laborales.

La escuela dispone de una bolsa de trabajo para sus alumnos. La confianza del sector empresarial en esta escuela ha hecho posible que desde el año 89 más de un 90% de los alumnos de TOPI se incorporen al mercado laboral al final de su proceso educativo. Nuestro objetivo es que estos futuros profesionales conozcan la obra de Juan Altamiras e interioricen su recetario.